viernes. 19.04.2024

Nick Amado, en una fotografía de Cristina Dao

ALMERÍA.- En la temporada que venido a igualar a la de más norteamericanos en la Superliga a la vez, estando dos en Ushuaïa Ibiza Vóley, Edwin Moses y Jordan Ewet, ambos receptores, y otro en Emevé Lugo, Matthew Knigge, central, el club de más tradición de efectivos de esa nacionalidad USA a lo largo de la historia, el Unicaja Costa de Almería, no iba a ser menos. De los 18 contabilizados desde que se hace registro por nacionalidades en la Real Federación Española de Voleibol, la mayoría se han vestido con el verde ahorrador y han dejado una gran huella en el vóley nacional, tal y como pretende Nick Amado en la que es su primera aventura fuera de su país. En la campaña 2010-2011 hubo también cuatro, dos en el club blanquiverde, Smith y Salmon, uno en Tenerife Sur, Samuel Moisenco, y otro en Zaragoza, con ‘pasado almeriense’, Matthew Denmark, que concretamente jugó en Unicaja el curso antes.

Amado, con personalidad muy abierta que le hace estar en permanente interacción con sus compañeros tanto fuera como dentro de la pista, despedirá el año ‘echando un pulso’ pegado a la red con Knigge precisamente, el MVP de esta jornada, porque los ahorradores cerrarán 2019 y la primera vuelta de la fase regular ante Emevé en el Moisés Ruiz. Pero antes de eso quedan cuatro partidos más, todo ellos de enorme importancia, uno decidiendo si se reconquista el liderato de la Superliga y otro para ver si, en caso positivo, se mantiene, y otros dos poniendo en juego el pasaporte de los cuartos de final de la CEV Challenge Cup. En definitiva, la disputa de estos cinco encuentros en 14 días no supone ninguna preocupación para Nick Amado, conciso y muy rotundo en su expresión: “En absoluto esto es un problema, porque nosotros somos deportistas profesionales y este es nuestro trabajo”. La disciplina previa que se ha aplicado al entrenamiento le hace estar muy seguro y confiado.

Precisamente por esa aplicación tajante de la profesionalidad que en él es norma, lo de perder en Teruel el pasado sábado solo es parte de un camino que no cesa y cuyos próximos destinos no permiten echar la vista atrás: “Después de la derrota es normal que nos sintiéramos tristes, pero solo al principio; está claro que, para el grupo, perder no es el objetivo, pero todos entendemos que hay mucho voleibol por delante y que solo debemos seguir mejorando”. Es más, la mejoría de la puesta en escena del equipo en ese mismo escenario respecto a la Supercopa de España fue más que evidente, a pesar de tener a Ignacio Sánchez renqueante por un problema en la espalda similar al que sufrió Fran Ruiz el curso pasado, también en el entreno previo a partido en la misma pista: “Creo que el juego se redujo a las pequeñas cosas, cosas que definitivamente podemos arreglar entrenando y trabajando duro”.

De eso se está tratando en la semana ahorradora previa a buscar igualar a puntos a Urbia Vóley Palma, que supondría, por coeficiente de victorias-derrotas recuperar el liderato aunque venza su partido en Cabezón de la Sal el CV Teruel y se produzca un triple empate en lo más alto de la clasificación. Además, se sellaría clasificación para la Copa del Rey y se estaría cerca de ser cabeza de serie, teniendo en cuenta que turolenses y palmesanos se medirán entre ellos en la última jornada de 2019. Todas esas cuentas están en la mente de los rivales, y ante los de Marcos Dreyer el central se espera “otro partido difícil”, ante lo que añade “estaremos listos para ellos, así que estamos motivados”. Amado también se apunta a la lectura general de que la principal preocupación es la de que Unicaja Costa de Almería saque en la pista su verdadero nivel: “Sólo sé que son nuestro próximo oponente, por lo que son el próximo equipo que necesitamos doblegar”.

Este jueves se hará entrega del informe habitual que el cuerpo técnico entrega a los jugadores, uno a uno, para el estudio del partido, algo que el norteamericano se ha preocupado en valorar muy positivamente cada vez que se le ha preguntado. A su entender, se trabaja muy bien en el seno del club y quiere dar una respuesta lo más adecuada posible con su mejor versión: “Me va muy bien emocionalmente, eso es así, pero siempre hay margen de mejora cuando se trata de voleibol, y siempre voy a tratar de mejorar”. Plenamente encajado en la dinámica de la entidad blanquiverde y en la ciudad, percibe el sentimiento de emoción por poder volver a la competición europea después de casi ocho años, algo que le llena y lo motiva a partes iguales: “Sí, me siento honrado de ser parte de este momento, estoy emocionado de ver lo que el CEV tiene preparado para nosotros”.

Como un almeriense más, espera con muchas ganas el cambio de balón que se va a producir el miércoles, puede que ya con la incorporación de Pei Hung Huang a las filas ahorradoras: “Creo que será otro gran activo para un equipo que ya es, de por si, excelente”. El taiwanés será recibido con los brazos abiertos por un Nick Amado que bromea sobe su primer acción de gracias lejos de casa: “Me cené un kebab”.

Nick Amado o llegar a la Navidad sobrevolando la red
Entrando en la página solicitada Saltar publicidad